En La Casita de Inglés basamos nuestra metodología en Play Based Learning (aprendizaje basado en el juego), así que no es de extrañar que seamos unos auténticos expertos en juegos de mesa. Por este motivo, no sólo hemos recopilado algunos de nuestros juegos favoritos para aprender inglés, sino que además os proporcionamos algunos consejos para sacarles el máximo partido.

Se aprende inglés mejor mediante el juego

  • Hedbanz es un juego fantástico para aprender a formular preguntas y descripciones. Además, se puede clasificar el vocabulario aprendido en diferentes categorías.
  • Tanto pequeños como mayores se divertirán muchísimo poniéndose las diademas y tratando de adivinar la tarjeta seleccionada.
  • Por otro lado, es bastante fácil incrementar la dificultad de las preguntas y respuestas para desafiar participantes con mayor nivel, por lo que el abanico de edad de los participantes puede ser tan amplio como queramos.

No nos cansaremos de repetirlo. Los niños (y los no tan niños) aprenden idiomas muchísimo mejor cuando se lo están pasando bien. Pero, ¿y si convertimos el aprendizaje de inglés en una actividad para toda la familia? ¿Y si además de aprender inglés juntos, podemos estrechar vínculos y crear recuerdos para toda la vida?

Para ello os proponemos los juegos de mesa en inglés. Una solución sencilla y barata que no sólo supone una idea fantástica como regalo de cumpleaños o Navidad, sino que nos aportará muchas horas de entretenimiento educativo para los fines de semana lluviosos.

LA CLAVE ESTÁ EN LA INTERACCIÓN

Para lograr un aprendizaje significativo es importante realizar la actividad totalmente en inglés y ,a ser posible, con una persona que tenga un nivel nativo o, en su defecto, avanzado. De esta forma se conseguirá una interacción auténtica y una mejor práctica del lenguaje. 

Un buen punto de partida para crear interacción es hacer preguntas, aunque siempre deberían ser en inglés. De hecho, hacer preguntas, demostrar frustración o felicidad con mucha expresividad es precisamente algo muy recomendable para ayudar a nuestros hijos a asimilar los matices de expresiones coloquiales en inglés.

  • Tummy Ache es un juego fantástico para aprender vocabulario relacionado con la comida.
  • Cada participante debe completar un menú completo con alimentos saludables, incluyendo primer plato, segundo, bebida y postre. El ganador del juego será quien complete un menú completo sin insectos.
  • Un juego estupendo para niños y niñas muy pequeños, pues no es necesario un dado ni saber contar para poder jugar.

Que no falte el sentido del humor

Como siempre, tenemos que recordar lo primordial. Si es un juego de mesa, más allá de ser un medio para aprender inglés, lo principal es divertirse. Hacer chistes, reír y ponerle humor a cada etapa del juego debería ser la regla suprema del juego

Además, el sentido del humor en los juegos de mesa ayuda a los niños pequeños a saber ganar con elegancia pero sobre todo a tolerar la frustración cuando pierden

  • Dobble es un juego divertidísimo para desafiar la agudeza visual, la velocidad y la riqueza de vocabulario
  • Además, su forma y tamaño hace que sea perfecto para llevar en la mochila para viajes. Se puede jugar en el coche o en el avión sin miedo a perder dados ni fichas pequeñas.
  • Los jugadores compiten para encontrar la imagen de una correspondencia entre una tarjeta y otra, pudiendo adaptar la dificultad según el tamaño de las imágenes.

Cualquier excusa es buena para hablar

Más allá de la interacción clásica y esperable de un juego, no descartes cualquier pretexto para sacar un tema de conversación. 

Con cualquier palabra nueva que surja en el juego, con cualquier elemento se puede improvisar un tema de conversación, una pregunta o un desafío que contribuya a motivar competitividad en el juego. 

Es importante insistir para que todos los participantes construyan frases completas al responder a preguntas o durante los cambio de turnos.

Siempre se puede aumentar la competitividad

Ni muy complicado ni demasiado sencillo. Hacer que los juegos de mesa sean más competitivos aporta diversión adicional y además favorece el aprendizaje del inglés (siempre que se haga con sentido del humor).

Además, algo tan sencillo como aportar normas nuevas puede resucitar el entusiasmo por re-descubrir juegos de mesa que teníamos abandonados por casa por resultar “demasiado infantiles”. Sin lugar a dudas, cualquier juego se puede convertir en el favorito cuando se añaden límites de tiempo, premios sorpresas, normas novedosas, o “castigos” desternillantes.  ¡No dudes en echar a volar tu imaginación!

  • Brain Box es un juego completísimo para que toda la familia pueda disfrutar de diferentes retos de tan sólo 10 minutos.
  • La mitad son de nivel fácil y están en inglés y en español; la otra mitad son algo más difíciles y están solo en inglés.
  • 55 tarjetas que con 440 preguntas distintas.

Toda la familia puede participar  

Los juegos de mesa son especiales por su potencial de conexión. Evidentemente, se puede jugar a juegos de mesa entre amigos, pero es innegable que se genera un encanto singular cuando la familia encuentra ese momento para participar en una actividad grupal. 

Desde los hermanitos más pequeños (participando en pareja con un familiar adulto) hasta los abuelitos, todos pueden disfrutar de los beneficios de esta sencilla actividad. De hecho, recomendamos traer siempre juegos de mesa a reuniones familiares o los viajes durante las vacaciones escolares. 

  • Cluedo es un juego clásico que desafía las dotes detectivescas de toda la familia.
  • Cada participante debe tomar nota de las pistas de los demás para tratar de adivinar todos los detalles de la escena del crimen
  • Es un juego perfecto para niños y niñas mayores de 8 años

Como conclusión, recomendamos encarecidamente no subestimar el potencial tan enriquecedor que encontramos en los juegos de mesa, tanto para aprender inglés como para generar recuerdos que, sin duda, atesoraremos en el futuro.